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Música y Educación

de Ana Lucía Frega

Miembro de Número de la Academia Nacional de Educación

¿Qué significa "entender" la música?

por Ana Lucía Frega  

La Nación, Lunes 29 de octubre de 1979, Educación musical

Es habitual oír la siguiente afirmación: "A mi me gusta mucho la música... pero no la entiendo".
Pensamos, como educadores musicales, que afirmaciones de este carácter merecen nuestra atención. ¿Qué significa aquí "entender"?
Si se trata de reconocer un creador, o un estilo, o una forma, o una época, sería oportuno recordar que, a los efectos de la captación de los valores profundos de una obra de arte musical -que son de orden estético- el manejo comprensivo de ésta y otras informaciones es evidentemente indispensable.
Debemos reconocer sin embargo que hay instancias, o momentos, en la aproximación al arte musical. Podemos, con seguridad, referirnos a un proceso.
La primera etapa de ese proceso es justamente la acción de gustar, de experimentar placer, de recrearse, de gozar. En este campo, el juicio de valor subjetivo que se expresa con "me gusta" o "no me gusta" es totalmente válido y respetable.
Peor nos referimos a instancias. No toda obra musical -arte que se desenvuelve a lo largo del tiempo, lo que significa un rasgo casi único de ese arte- es aceptada o gustada prima fascie. Podríamos decirlo así:  primera audición. Es necesario retomar la obra, una y otra vez, para irla penetrando mientras permitimos que ella, a su vez, nos impregne.
Esta tarea, la de ir recorriendo etapas, instancias, es la que preocupa al docente de música de nivel medio. En este nivel se trabaja con una población escolar particularmente fijada, anclada en un tipo de música. Hoy, la que podríamos englobar bajo el título genérico de música pop.
Toda, la otra, no la "entiende". Por un lado, no le interesa, no le encuentra sentido, entre otras cosas, porque no está de moda. Aquí se nota una vez más la relevante función  educativa -casi determinativa- de los medios de comunicación social, que deberían ejercer su acción con mayor responsabilidad.
¿Puede actuar la escuela frente a esto? La respuesta es afirmativa. Debe hacerlo. Y es importante señalar que puede lograrlo.
De un estudio comparativo de los materiales básicos, de las formas elementales de todas las músicas, surgirá la evidencia del parentesco entre lo pop y la música que podemos llamar culta.
De la observación, por la audición y por la realización musical en vivo por parte de los alumnos, de la evolución y tratamiento creativo que esas ideas básicas o primarias pueden ir sufriendo por la ejercitación de la creatividad del hombre, irá presentándose ante el adolescente un nuevo objeto de asombro. Una nueva razón para admirar el genio, la capacidad, la destreza del ser humano cuando éste busca sus mejores y más nobles medios de expresión.
Naturalmente, hay un esfuerzo por cumplir. También es obvio que no toda la música será gustada, apreciada, "entendida". Esta libertad en la aceptación es patrimonio del mundo del arte.
Pero se habrá adelantado en el proceso de la comprensión de la labor creativa del hombre.

 

 

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Fecha de lanzamiento 1-02-2001
Responsable: Ana María Mondolo